El procedimiento fue suspendido en octubre, cuando la oposición suspendió sus movilizaciones de protesta y las medidas de la Asamblea contra Maduro, para abrir un diálogo con el gobierno con facilitación del Vaticano y la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur).
La oposición decidió reanudar el proceso al estimar que hay un estancamiento en el diálogo, del que responsabilizó al gobierno por incumplir los acuerdos anteriores, por lo cual los detractores del presidente decidieron ausentarse de la mesa la semana pasada.
El diputado opositor Miguel Matheus aclaró que el procedimiento contra Maduro es diferente al que se realizó en Brasil para destituir a la presidenta Dilma Rousseff, pero sostuvo que tendría como consecuencia la solicitud de un antejuicio de mérito al presidente.
Por otro lado, la oposición igualmente solicitó en la mesa de diálogo la liberación de sus dirigentes presos, el respeto a la autonomía de la Asamblea Nacional y la reanudación del proceso para realizar un referéndum revocatorio contra Maduro, suspendido por orden judicial.
Hay que destacar, que Nicolás Maduro desconoce a la Asamblea, al afirmar que está en desacato ante las decisiones del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), por su rechazo a las sentencias judiciales emitidas que limitan sus atribuciones.