EFE | Martes 23 de julio de 2013
El
asfalto de las calles puede absorber un contaminante como el óxido de nitrógeno
(NOx) y reducir la polución, de una forma menos costosa y con menor rechazo
social que otras soluciones planteadas en grandes ciudades.
La
Fundación Cartif, que tiene su sede en el parque tecnológico de Boecillo, en
Valladolid, coordina un proyecto europeo Life que por primera vez pretende
demostrar a escala real la efectividad de un sistema de fotocatálisis, ha
explicado a EFE el investigador José Fermoso.
Este pavimento asfáltico lleva
dióxido de titanio (TiO2) y con la radiación solar produce una reacción
química, que cataliza la luz a través de este semiconductor. El resultado es
que el asfalto captura ese contaminante del aire, generado principalmente por
el tráfico de vehículos, y lo transforma en otros compuestos, ha indicado este
investigador del área de Tecnología Ambiental del centro tecnológico de Cartif.
José Fermoso ha recordado que grandes ciudades, como Madrid o Barcelona, han
superado en varias ocasiones los límites por contaminación de óxido de
nitrógeno que permite la Unión Europea, por lo que se arriesgan a cuantiosas
multas. Sin embargo, con el proceso que investiga Cartif el óxido de nitrógeno
quedaría fijado en el asfalto, lo arrastraría la lluvia hasta el alcantarillado
y llegaría a la depuradora, con lo que se eliminaría uno de los contaminantes más
perjudiciales para la salud.
Fermoso, de la división Agroalimentación y
Procesos Sostenibles de Cartif, ha comentado que el óxido de nitrógeno queda
fijado como una sal en el pavimento, que tras pasar por la depuradora es
inocua. Este Life Equinox cuenta con un presupuesto de cerca de un millón y
medio de euros durante tres años y con la colaboración del Ayuntamiento de
Madrid y de las empresas Repsol, Elsan y Servià Cantó.
Lo novedoso del proyecto
es que supone un ensayo a gran escala de su aplicación real, ya que se
utilizará en una zona de la capital de España la red de sensores de calidad del
aire para comprobar su efecto, ha destacado el investigador. Antes sólo se
había experimentado en una calle concreta, pero el proyecto irá más allá,
abarcando toda una zona de la ciudad, con el objetivo de reducir este
contaminante hasta en un 25 por ciento.
La aplicación de este sistema sería
inmediata, con un coste económico asequible, y evitaría soluciones menos
populares como restringir el acceso de vehículos al centro, que han sido
controvertidas cuando se han intentado aplicar en algunas ciudades.
Cartif, con
sede en el Parque Tecnológico de Boecillo, cerca de Valladolid, es un centro
especializado desde 1994 en el desarrollo de proyectos de I+D y de innovación
en múltiples campos, que en la última convocatoria ha conseguido seis proyectos
Life de la Unión Europea en medio ambiente.
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