Santo Domingo.- Un conjunto de 15 medidas firmes y claras fue anunciado por el presidente Abinader este domingo, como parte de su sólido compromiso de asegurar la paz, la seguridad y la soberanía nacional. Algunas de estas medidas pueden resultar dolorosas, pero son consideradas necesarias para proteger a la República Dominicana y garantizar el respeto a las leyes del país.
En un mensaje dirigido al pueblo dominicano, el mandatario comunicó que la capacidad de supervisión de las tres brigadas fronterizas actuales se ampliará en seis áreas operativas, cada una bajo la supervisión de un oficial superior. Además, anunció que se reforzará la vigilancia en la frontera con mil quinientos soldados adicionales, sumándose así a los nueve mil quinientos que ya están en servicio en esa zona.
"Un mensaje claro e innegociable será enviado: en nuestra tierra, las bandas criminales haitianas no hallarán refugio. La República Dominicana no permitirá que la violencia que arrasa Haití cruce sus fronteras", afirmó durante su discurso, el cual fue difundido a través de una cadena de medios televisivos, radiales y redes sociales oficiales.
El gobernante indicó que la tercera medida consiste en acelerar la construcción del muro fronterizo. Para ello, el Ministro de Defensa ha recibido la orden de iniciar de manera inmediata la licitación para edificar 13 kilómetros adicionales a los 54 kilómetros ya construidos, con el objetivo de reforzar la capacidad de respuesta ante cualquier amenaza que intente ingresar al territorio dominicano.
"Las consecuencias deberán ser enfrentadas por quienes faciliten el tráfico irregular de personas. Buscamos que estas repercusiones sean las más severas. Por esta razón, en el anteproyecto de reforma del Código Laboral que se está debatiendo en el Congreso, hemos incorporado mecanismos de supervisión y sanciones que incrementarán el costo para los empleadores que no cumplan con la ley", advirtió.
Se anunció que la próxima semana se presentará en el Congreso Nacional un anteproyecto de reforma al marco legal migratorio vigente, el cual debe ser tratado con carácter urgente. Esta iniciativa busca endurecer las sanciones en varios casos, incluyendo a funcionarios gubernamentales, tanto civiles como militares, que faciliten o participen en la entrada de inmigrantes indocumentados, así como a organizaciones o individuos que reincidan en el tráfico de personas en situación irregular. Además, se propondrá la implementación de sanciones severas para situaciones no contempladas en la legislación actual, tales como aquellos propietarios de viviendas o locales comerciales que alquilen sus inmuebles a personas con estatus migratorio irregular.
"Desde el 2023, nuestros consulados en Haití están cerrados, lo que significa que no hemos emitido visas en casi dos años. La situación de la entrada irregular es un problema; por ello, debemos mantenernos firmes. Aquellos que se encuentren en nuestro territorio de manera irregular deben abandonar el país voluntariamente o serán localizados y repatriados", precisó.
Con el objetivo de mejorar la situación, se están sumando setecientos cincuenta nuevos agentes migratorios como quinta medida. Además, como sexta acción, se proseguirá con la instalación de oficinas de control migratorio en todas las provincias, lo que permitirá ampliar la capacidad operativa de la Dirección General de Migración.
"La frontera representa una oportunidad para el comercio para muchos. Durante años, la apertura de los mercados binacionales ha funcionado como un puente comercial; sin embargo, también ha facilitado que algunos crucen con la intención de permanecer en nuestro territorio de manera ilegal, en lugar de intercambiar bienes", expuso.
El momento de reforzar las normas que regulan los intercambios en la frontera ha llegado.
En este contexto, enfatizó que es momento de reforzar las normativas que regulan estos intercambios, asegurando así que el comercio continúe fluyendo, pero con el orden y la seguridad que requiere la soberanía.
La modificación del reglamento de operación de los mercados fue anunciada como séptima disposición, con el objetivo de garantizar que se convierta en una puerta abierta al comercio, aunque no para la migración irregular.
"Seremos firmes, pero también justos. La ley adquiere su verdadero valor únicamente cuando se aplica. Es claro que los controles fronterizos por sí solos no son suficientes para abordar el desafío migratorio; es necesario erradicar desde la raíz los delitos que lo sostienen", enfatizó.
En su alocución, el presidente Abinader mencionó que, como octava medida, propondrá a la Procuraduría General de la República la creación de una Procuraduría Especializada en Asuntos Migratorios. Esto tiene como objetivo asegurar la investigación y persecución que lleven a condenas ejemplarizantes por todos los delitos y la explotación relacionada con la migración irregular.
Argumentó que, dado que se trata de un problema que necesita la colaboración de todos, solicitará como novena medida la ayuda de los Gobiernos locales para mejorar la eficiencia de las repatriaciones en todo el país.
La creación de un Observatorio Ciudadano sobre el Funcionamiento de la Política Migratoria fue anunciada por el gobernante como parte de su décima disposición. Este organismo tendrá como objetivo supervisar el cumplimiento de la política y proponer ajustes desde la sociedad civil. "Este observatorio, que operará con absoluta autonomía e independencia será coordinado por el periodista Miguel Franjul".
El presidente afirmó que los dominicanos tienen el derecho a recibir atención médica sin ser desplazados. "No podemos seguir practicando una liberalidad que compromete nuestros recursos".
Se comunicó que, con el fin de regular la llegada de personas en situación migratoria irregular a los hospitales públicos, se ha decidido implementar una medida adicional. Esta consiste en establecer un protocolo que deberá estar preparado para su uso el lunes 21 de abril. El personal de los hospitales del Servicio Nacional de Salud (SNS) estará obligado a solicitar los siguientes documentos: una identificación, una carta de trabajo en el país y una prueba domiciliaria. Asimismo, se fijará una tarifa para todos los servicios ofrecidos.
Si no se cumplen los requisitos mencionados, el paciente recibirá atención y será repatriado de inmediato una vez que se haya recuperado, precisó. "Se establecerá un agente migratorio en cada hospital para garantizar el cumplimiento de este protocolo".
No se verán desplazados los derechos de los dominicanos.
"En su mensaje a la nación, advirtió que los derechos de los dominicanos no serán desplazados. La dilución de nuestra identidad no ocurrirá. No se aprovecharán de nuestra generosidad. Aquí, la solidaridad tiene límites", afirmó.
Se subrayó que la economía dominicana está en crecimiento y se presenta como un modelo para la región. Sin embargo, el desarrollo del país no debe depender de la ilegalidad y la falta de control. Por lo tanto, es crucial ordenar con firmeza la situación de los trabajadores indocumentados en aquellos sectores que fomentan la economía.
Como duodécima medida, se decidió iniciar el estudio de la normativa migratoria dominicana en respuesta a la situación actual de Haití. "Hemos decidido nombrar al doctor Milton Ray Guevara como coordinador de una comisión que ejecutará esta tarea".
La migración irregular, que genera una preocupación considerable por la posible pérdida de empleos para los ciudadanos, no puede ser ignorada ni minimizada, afirmó. Como treceava medida, decidió impulsar en la discusión salarial tripartita la dominicanización del empleo, promoviendo un incremento del 25 % en las zonas francas y del 30 % en el sector turístico. "Porque cuando el trabajo se valora y se paga bien atrae a la gente".
El jefe de Estado afirmó que el avance no debería plantearse como una elección entre recibir asistencia o percibir un salario, sino como la oportunidad de mejorar la calidad de vida al obtener ambos. En este contexto, presentó la disposición número catorce, que asegura que los beneficiarios del programa Supérate podrán integrarse al trabajo en los sectores agrícola y de construcción sin perder su apoyo.
Se destacó que la mano de obra ilegal ha sido una dependencia excesiva para la agricultura y la construcción durante un largo periodo. La producción agrícola y la edificación urbana no pueden seguir basándose únicamente en el trabajo manual que promueve la migración irregular. "Debemos continuar cambiando esa realidad, acelerando el proceso de mecanización agrícola e incorporando técnicas de construcción de baja intensidad de uso de mano de obra".
El presidente Abinader anunció que, como parte de la quinceava medida, se ampliará el fondo administrado por el Banco Nacional de Desarrollo y Exportaciones (Bandex). Este fondo, establecido por su administración para tales propósitos, ha otorgado hasta ahora dos mil ochocientos millones. La ampliación tiene como objetivo proporcionar a las asociaciones y cooperativas de productores los recursos necesarios para su transformación tecnológica. "El sector privado de la construcción y el agrícola debe pactar con el gobierno su industrialización y mecanización, en un período prudente de tiempo".
A la comunidad internacional le hacemos un llamado: es necesario que cumplan con su deber. La ayuda es urgente para Haití.
"Sí, entendemos la preocupación del pueblo dominicano, ya que también es nuestra. Con incansable perseverancia estamos trabajando en ello y continuaremos hasta el final. A la comunidad internacional les hacemos un llamado: cumplan con su deber. La ayuda es necesaria para Haití, porque la República Dominicana no puede ni debe asumir una crisis que no le corresponde", insistió el presidente Abinader.
Se manifestó que habrá personas que lo critiquen o que le demanden asumir una crisis que no hemos generado. "A ellos les decimos: ya cargamos demasiado, pero nunca sacrificando la seguridad, la estabilidad y el bienestar del pueblo dominicano".
"La determinación ha llegado. La unidad es esencial en este momento. Ninguna nación puede solucionar sus problemas si está dividida, y la indiferencia no ofrece respuestas a ningún desafío. El problema migratorio requiere más que críticas vacías; exige colaboración, responsabilidad y acción", proclamó.
El mandatario instó a que todos -políticos, empresarios y miembros de la sociedad civil- refuercen el Pacto Nacional para la Formulación y Ejecución de Políticas de Estado en respuesta a la situación en Haití, el cual fue firmado en el Palacio Nacional en 2023. "Con este Pacto buscamos poner orden donde por décadas existió desorden, un Pacto para garantizar soluciones sin ceder soberanía, un Pacto para hacer cumplir la ley con firmeza y justicia. Colaboremos todos, porque la historia nos juzgará, no por lo que critiquemos, sino por lo que fuimos capaces de construir juntos".
Los pueblos que logran resolver sus problemas son aquellos que se mantienen unidos, poseen principios claros y tienen el valor de defenderlos; esta causa es justa. Su determinación es inquebrantable y su decisión, firme.
"Confiemos en nuestra fuerza, en nuestra unidad y en nuestro derecho a decidir nuestro destino, le digo a todo el pueblo dominicano. Esta nación ha defendido su identidad y seguridad en el pasado, y lo haremos nuevamente. Siempre defenderemos nuestra patria, con la cabeza en alto, la ley en la mano y el corazón comprometido con ella", aseguró.
Comparte la inquietud que sienten los dominicanos.
Al expresar que también comparte la preocupación, se reconoció que muchos dominicanos están inquietos por la amenaza que Haití representa. Esta situación incluye la migración irregular que genera, así como la carga que impone sobre los hospitales y escuelas del país, además de los riesgos para la seguridad y el impacto en la economía nacional.
"Lo que ocurre más allá de nuestra frontera es algo que conocemos. Haití enfrenta el momento más sombrío de su historia debido a diversas crisis. Existen problemas de seguridad, ya que las bandas criminales dominan su territorio; hay una crisis medioambiental provocada por la deforestación y la escasez de agua; y también se presenta una crisis económica, resultado de la carencia de medios de producción", destacó.
“Por la falta de institucionalidad democrática, se presenta una crisis política”, añadió. “La crisis de abandono es la más grave, provocada por la actitud irresponsable de la comunidad internacional que ha dejado a Haití a su suerte. Ninguna de estas crisis fue generada por nosotros, pero todas tienen consecuencias que nos impactan”.
Se condenó que las advertencias fueron desatendidas durante un periodo prolongado, lo que dejó la frontera en una situación de vulnerabilidad y permitió que las leyes no se aplicaran. Asimismo, el problema creció sin que se ofrecieran respuestas, soluciones o liderazgo.
"Conmigo eso fue el final. Asumir el costo de hacer lo correcto, incluso cuando es más sencillo ignorar la situación, es lo que significa liderar. ¡Hoy estamos actuando con una responsabilidad firme que ningún gobierno había demostrado antes!", afirmó el jefe de Estado.
La vigilancia en la frontera alcanza niveles sin precedentes, ya que miles de soldados están en constante monitoreo por parte del Gobierno. Además, se está llevando a cabo la construcción de un muro que muchos otros ni siquiera se atrevieron a prometer. Se realizan operativos continuos para repatriar a miles de indocumentados, y el presidente Abinader ha alzado su voz en todos los foros internacionales para instar a la comunidad internacional a actuar.
"La presión para detener las deportaciones, tanto de organismos internacionales como de gobiernos, nunca fue aceptada por mí. Fui el único presidente que no firmó el tratado migratorio que se presentó en la Cumbre de las Américas en 2022. Resaltó que aumentamos en un 30 % la cantidad de militares en la frontera y triplicamos su salario."
Asimismo, "se adquirieron vehículos blindados y equipamientos de una manera que no se había hecho en décadas. Ante un problema que parece no tener solución, nuestra nación está actuando con más responsabilidad que nunca. En una isla donde coexiste el país más pobre del hemisferio occidental con un Gobierno colapsado, nosotros nos encontramos como la nación con el mayor crecimiento económico en las Américas".
Frente a esa tormenta, proclamó que la República Dominicana no se rendirá ni se arrodillará.
Se expresó que "nos convoca un deber ineludible, un desafío que no elegimos, pero que debemos enfrentar con valentía y con determinación: el desafío de un desplazamiento migratorio irregular de un pueblo que tiene sus calles tomadas por la violencia, abandonado a la desesperanza, donde el orden ha sucumbido frente al caos".
En su mensaje dirigido al pueblo dominicano, el mandatario enfatizó que no se puede ignorar esta situación ni pretender que no tiene impacto. Además, subrayó que no se debe permitir que el desorden y la inseguridad crucen las fronteras.