Pasar un día en el pueblo de Salinas es una excelente opción para las personas que viven en Santo Domingo, sobre todo ahora que ya está terminado el tramo de autopista que comunica la capital con Baní.
Es de esta población de donde sale la carretera que llega directamente a Salinas. Al llegar, después de la entrada a la base naval de Las Calderas, en la parte izquierda de la carretera se desarrolla el mayor campo de dunas de la isla, llegando algunas de ellas a alcanzar más de diez metros de altura, conocida como Las Dunas, es un monumento natural de nombre "Las Dunas de Las Calderas".
Para visitar las dunas se debe tomar un ticket en Centro de Recepción de Visitantes del área protegida, pudiendo luego explorar este territorio dunar donde observaremos iguanas y aves en un entorno realmente impresionante.
Es aconsejable armarse de calzado, una gorra, agua y protector solar, pues subir las dunas a pleno sol es tarea que requiere algo de esfuerzo. Sin embargo el empeño vale la pena, pues el paisaje, jalonado de cactáceas y de plantas endémicas de la isla es realmente hermoso.
Más adelante, después del pueblo de Salinas, tenemos dos hermosas playas, donde se practica desde el kitesurf hasta el buceo con esnorquel. Las viejas construcciones de madera que se encuentran entre las salinas son de gran belleza escénica, sobre todo al atardecer. En este ambiente resulta muy agradable sentarse a comer un pescado fresco en cualquiera de los restaurantes locales que proliferan en el pueblo.
Fuente: Accessdr.com