El Departamento de Estado de Estados Unidos emitió una alerta de
viaje en la que solicita a sus ciudadanos, abandonar Libia
"inmediatamente" y evitar cualquier desplazamiento a ese país. La
alarma se debe a la crisis política y de seguridad que atraviesa esa
nación.
A consecuencia de la
situación "inestable e impredecible" en Libia, Estados Unidos ha
reducido el personal de su embajada en Trípoli y sólo puede ofrecer servicios
de emergencia "muy limitados" a los ciudadanos estadounidenses que
residen en ese país, indica la alerta de viaje.
Libia atraviesa una
profunda crisis política y de seguridad desde el pasado día 16, cuando el
general retirado Jalifa Hafter protagonizó una sublevación armada en la ciudad
oriental de Bengasi.
En su alerta, el
Departamento de Estado explica que los ciudadanos estadounidenses en Libia se
exponen a ser víctimas de secuestros, ataques violentos y asesinatos.
"La incidencia del
crimen continua siendo muy alta en muchas partes del país. Además, varios
grupos extremistas han lanzado amenazas específicas contra los ciudadanos e
intereses estadounidenses en Libia", indica la alerta.
"El Gobierno libio no
ha sido capaz de mejorar la seguridad después de la revolución de 2011. Muchas
armas militares continúan en manos de particulares, incluso armas que pueden
ser usadas contra la aviación civil", precisa.
Desde la caída del régimen
de Muamar al Gadafi, Bengasi ha sido escenario de numerosos asesinatos y
atentados y, aunque la mayor parte han sido dirigidos contra miembros de las
fuerzas de seguridad, también activistas políticos, jueces y periodistas han
sido blanco de estos ataques.
El pasado 16 de mayo, el
general retirado Jalifa Hafter, al frente de milicias y grupos paramilitares
fieles, lanzó una ofensiva contra varias milicias de Bengasi a las que
considera responsables de estos ataques.
El asalto encabezado por
Hafter, que responsabiliza a las milicias islamistas y a los grupos terroristas
islámicos de la oleada de asesinatos en el este del país, ha desatado una
profunda crisis política en Libia y ha hecho saltar las alertas de numerosos
países que temen un eventual colapso del sistema político libio.
Fuente: Miami Diario.