Santo Domingo.- En el pasado
mes de abril, el texto de Rivera tuvo una lectura dramatizada en Lisboa,
Portugal por los actores de la Compañía Nacional de Teatro, Doña María II.
El 28 presenta un espacio manicomial donde talibanes, mamberos, cocolos y
terroristas representan lo que para algunos es nuestra más distintiva
condición: una hiperactividad contemplativa. El montaje del Teatro Guloya ha
sido premiado en New York Premios ATI y con tres nominaciones al
Casandra en Santo Domingo.
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