Par�s.- Varios ministros de Macron han acusado a la alcaldesa parisina, Anne Hidalgo -cuyo partido es opositor al Ejecutivo-, de "promover" el paro de los operarios de la limpieza por intereses pol�ticos y de no hacer nada ante lo que juzgan "un problema de salubridad y seguridad p�blica".
En una entrevista a la radio France Inter, el ministro de Hacienda, Gabriel Attal, abri� hoy incluso la puerta a que se obligue por decreto a trabajar a los basureros y a los empleados de las plantas incineradoras, como sucedi� el pasado a�o en un paro similar en Marsella, una de las principales ciudades francesas.
Por su parte, el portavoz del Gobierno, Olivier V�ran, incidi� tambi�n en que hay "una responsabilidad" del Ayuntamiento de Par�s, administrado por los socialistas en una coalici�n en la que participan verdes y comunistas.
El paro en el servicio de recogidas de basura en Par�s y en varias incineradoras de desechos -convocado al menos hasta el mi�rcoles- ha dejado unas inc�modas im�genes de la ciudad, una de las m�s tur�sticas del mundo por sus museos, la moda y la alta gastronom�a. En 500 d�as, la capital acoger� adem�s los Juegos Ol�mpicos de 2024.
La alcaldesa Hidalgo dej� a su concejala de Limpieza, Colombe Brossel, responder a las acusaciones. "Si se retira inmediatamente la reforma de las pensiones del Gobierno que eleva la edad m�nima de jubilaci�n a los 64 a�os, las incineradoras y los garajes (de los veh�culos de limpieza) se desbloquear�n inmediatamente".
Ediles conservadores de Par�s, como el alcalde del distrito XVII, han criticado tambi�n a la regidora por no acudir a prestadores privados para la recogida de la basura, ante el aumento de los �ndices de salubridad, reflejado en la proliferaci�n de ratas.
La mitad de los 20 barrios de Par�s tienen privatizado el servicio y s� que han visto sus desechos recogidos. El plan de reforma de las pensiones, cuya medida m�s impopular es el aumento de la edad legal de jubilaci�n de los 62 a los 64 a�os, est� en la �ltima fase de tramitaci�n parlamentaria en medio de una oleada de protestas y manifestaciones en gran parte de Francia.
El presidente Macron y su Gobierno la consideran fundamental para equilibrar a medio y largo plazo el d�ficit del sistema de pensiones, mientras que la oposici�n la ve innecesaria y juzga que las cuentas se pueden equilibrar de otra manera, por ejemplo, con una robusta reforma fiscal que tase a los m�s ricos.