Aseguró el presidente de Estados Unidos que "lo sabio
es reconocer que estas tragedias no son inevitables".
El
presidente estadounidense, Barack Obama, lamentó este domingo la
"epidemia" de violencia armada que sacude a un país
"resignado" a unas cifras de muertes y tragedias que son las mayores
de un país avanzado. Obama dijo que el país ya acepta con "insidiosa
resignación" que matanzas como la de Washington son "la nueva
norma". Recordó que "no hay nación
avanzada en el mundo que se enfrente a la violencia armada a la que se enfrenta
Estados Unidos", donde el índice de muertes por arma de fuego es diez
veces superior a cualquier otro país desarrollado.