José Ramón y Candy Román son una pareja excepcional dedicada al fortalecimiento emocional de las personas. El amor verdadero, según ellos, es un compromiso diario que se basa en el respeto, la confianza y el crecimiento mutuo. Este tipo de amor implica una comunicación abierta, empatía profunda, tiempo de calidad, paciencia infinita y un constante sentimiento de gratitud. Es una decisión consciente de apoyarse mutuamente y superar desafíos juntos, construyendo así un vínculo que trasciende generaciones. La historia de José y Candy es un ejemplo inspirador de cómo el amor puede transformar vidas y contribuir al bienestar emocional de aquellos que les rodean.
Por Bernabé Lagrule Coach de salud y fitness
Febrero, mes del amor, invita a reflexionar sobre la importancia de amarnos a nosotros mismos para poder amar a los demás. El amor se cultiva a través de acciones diarias y gestos simples. Practicar el amor genuino trasciende regalos y palabras, convirtiéndose en un regalo que todos podemos dar y recibir.
La cantante de pop urbano Sarodj lanzó el tema 'No puedo más', que busca promover la salud mental y crear conciencia sobre los problemas psicológicos y la importancia de dar apoyo a quienes atraviesan dificultades emocionales.
El texto aborda cómo la tecnología ha afectado negativamente las interacciones humanas, debilitando la calidad de las conversaciones cara a cara y disminuyendo habilidades sociales como el contacto visual y el saludo. Se menciona a Sherry Turkle, quien destaca la importancia de la conversación en persona para desarrollar empatía y relaciones profundas.
La empatía conecta corazones, reduce el estrés, mejora relaciones, aumenta la autoestima y fomenta la compasión. Es esencial para el bienestar emocional y nos permite vivir de manera más plena y satisfactoria. Cultivarla es fundamental para nuestra salud mental.
La empatía es esencial en un mundo acelerado y digital, donde las conexiones humanas auténticas a menudo se pierden. Esta habilidad nos permite entender y valorar las experiencias de los demás, mejorando nuestras relaciones personales y profesionales. Practicar la empatía puede transformar nuestra sociedad hacia un entorno más compasivo e inclusivo.
El detonante fue la mala experiencia de haber visitado un negocio al que no pienso volver.
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En ocasión del mes del amor, conversamos con Celeste Pérez y Víctor Guareño en una entrevista en que exploramos las dinámicas profundas y las cualidades esenciales que sustentan una relación de pareja duradera y enriquecedora. Desde la importancia de la empatía y el respeto hasta la chispa que mantiene vivo el amor a lo largo de los años, compartimos reflexiones valiosas y aprendizajes de experiencias pasadas:
El texto de Néstor Estévez aborda el arrepentimiento de influencers contratados por Barrick Gold para defender una presa en Cotuí. Destaca la falta de conocimiento y responsabilidad de estos creadores de contenido, y enfatiza la importancia de discernir la veracidad de los mensajes en internet, así como las características del arrepentimiento genuino.
El «reflejo sutil de la conmoción, el dolor y la profunda tristeza» en los rostros de los niños en Israel y Palestina, captado por la fotógrafa israelí Avishag Shaar-Yashuv y la palestina Samar Abu Elouf, ha sido distinguido con el premio del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) en Alemania a la mejor foto del año.
Es un hecho innegable que estamos cambiando. Ocurre con todo lo que vive. Sin embargo, resulta sabio y hasta muy oportuno preguntarse: ¿estamos cambiando para mejor o para peor?
Cuando caminamos de manera responsable por la vida, logramos observar nuestra evolución. Pero, sobre todo, buscamos en nuestro entorno aquellos referentes de vida que nos han enseñado cómo enfrentar el presente y el futuro, sin dejar de lado nuestro pasado, que nos puede mantener prisioneros o impulsarnos a ser mejores personas.
Con alta frecuencia escuchamos hablar sobre discapacidad, y en menor proporción nos toca tan de cerca el tema como para vivir lo que eso significa. Pero, ¿qué es discapacidad?
Hace poco visité un negocio al que no pienso volver. Es posible que su dueño haya tenido muy buenas intenciones y hasta puede ser buena persona, pero quien me “atendió” parece que se ha especializado en espantar a los clientes.
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